Mi primer papel más grande fue en TV3. Fue una oportunidad muy guay, la verdad! Luego, hubo un productor y director de teatro inglés que vino a Barcelona a hacer Shakespeare. Fui a ver a Romeo y Julieta, y me encantó. Entonces me apunté a un curso con él para trabajar Shakespeare y me cogió para su siguiente obra! Ha sido una experiencia increíble, y hoy en día sigo siendo muy amiga con el resto de actrices de la obra.

La verdad es que va a épocas! Hay momentos que busco más en la literatura, otros que busco más en los teatros, o en los museos… Pero creo que en general lo que más me inspira, es mirar las pequeñas cosas de la gente: observar. Me encanta imaginar lo que les está pasando a las personas de alrededor. Mis alumnos me inspiran muchísimo. Por donde va cada uno, como se toma la vida, como reacciona… En fin, ¡la gente me inspira!

La naturaleza también me encanta… Pero vivo en una ciudad! A ver, me encanta vivir en la ciudad, pero es verdad que me encantaría cada día levantarme y ver el mar. De hecho, cada vez que puedo, me escapo al mediodía para ir a sentarme frente al mar y comer con vistas.

Durante mucho tiempo, me he escondido detrás de la ropa. De adolescente me inquietaban mucho los comentarios de los hombres en la calle y me solía tapar el cuerpo detrás de la ropa. Creo que el empoderamiento se trata de esto: que cada una se pueda sentir libre de llevar la ropa que quiera. Siempre ha habido mucho juicio, y sería maravilloso que cada una pueda hacer simplemente lo que quiera. Pienso que todas tendríamos que poder llegar cada mañana llevando el estilo que queremos sin temer las posibles reacciones y los comentarios.